Luna Nueva en Virgo

Los planetas en oposición representan dos fuerzas en conflicto, polos opuestos, dos áreas que pueden parecer discordantes y son la columna vertebral de la configuración. En este caso uno de los puntos está ocupado por Neptuno Retro en Piscis que pide expansión de consciencia y disolución de los límites impuestos; y el otro por la fusión Sol – Luna en Virgo, que nos conecta con lo tangible, lo práctico y lo mundano. 

A simple vista parece imposible reconciliar el afuera y el adentro, lo efímero y lo tangible, el caos y el orden, el ego y el Alma. Pero alguien allá arriba se apiadó de nosotros y está dispuesto a ayudarnos a comprender que lo uno no puede existir sin lo otro. 

Acá sumamos a los planetas en sextil y trígono, que actúan como facilitadores, ayudándonos a encontrar un equilibrio y una solución a este conflicto (ponele). 

El barrilete nos desafía a integrar armoniosamente a estas dos áreas de experiencia. Nos impulsa a utilizar los recursos y talentos que representan los planetas en sextil o trígono para resolver los desafíos planteados por las fuerzas en oposición. 

Debo reconocer que me causan mucha gracia los métodos que el cielo nos ofrece con esta Luna nueva, porque los dos planetas que vienen a socorrernos son el Dios de muerte y el padre de la revolución.

De verdad comprendo que el sistema se fracturó, que Gaia nos pide actualizar el software cada cinco minutos, sé que el nuevo paradigma ya está impuesto y se encuentra en un punto de no retorno, sé que el desafío en estos tiempos es SER más y hacer menos. Sé que la nueva vida surge desde adentro y se encuentra en ninguna vidriera. Pero aun sabiendo todo eso no puedo dejar de preguntarme… ¿Era necesario muchachos que activen la munición pesada?